6 de febrero de 2011

Ejercítate en la Piedad

¿Les gusta hacer ejercicios?

Cuando vas al médico, hay dos preguntas básicas que seguramente te hará el doctor… ¿Fuma? ¿Hace usted  ejercicio? Lo chistoso es que nosotros decimos que sí ("camino, de la casa a la parada y de la parada al trabajo")…pero eso para los médicos no es hacer ejercicio, sino dedicarle un tiempo especial.

Lo cierto es que hacer ejercicio trae grandes beneficios para nuestra salud. Ahora, hacer ejercicios espirituales trae beneficios para nuestra vida eterna.

Vamos a estudiar una escritura, donde Pablo manda a ejercitarse a su hermano y amigo Timoteo, pero a ejercitarse en las cosas de Dios, ejercitarse en la Piedad.


1 Timoteo 4: 7-8
7  Pero no hagas caso de cuentos mundanos y tontos. Ejercítate en la piedad; 8  pues
aunque el ejercicio físico sirve para algo, la piedad es útil para todo, porque tiene
promesas de vida para el presente y para el futuro. 9 Esto es muy cierto, y todos deben
creerlo.10  Por eso mismo trabajamos y luchamos, porque hemos puesto nuestra
esperanza en el Dios viviente, que es el Salvador de todos, especialmente de los que
creen.11  Estas cosas tienes que mandar y enseñar.

El apóstol Pablo le manda una carta a su discípulo Timoteo y le dice  ¡Ejercítate en la piedad!

La palabra piedad viene de una palabra griega “Eusebeia” = Se le puede llamar “Devoción” Los escritores seculares decían que la piedad es una actitud correcta hacia Dios y las cosas de Dios.

La piedad entonces, son todas aquellas cosas que como cristianos podemos hacer para crecer en nuestra devoción a Dios.

Pablo le dice a Timoteo, “haz cosas que contribuyan a desarrollar tu devoción a Dios, tu reverencia a Dios, tu temor a Dios porque esas te van a traer grandes recompensas en esta vida y en la vida futura”.

Ejercitarnos en la piedad significa que debemos trabajar nuestro musculo espiritual a fin de tener una devoción mayor para Dios. Pero que debemos desarrollarlas como quien se entrena en un gimnasio.

La pregunta es ¿Qué tanto nos estamos ejercitando en la piedad? ¿Trabajamos cada día para crecer nuestro músculo espiritual? ¿Reflejamos un ejercicio espiritual?
Cuando vamos al gimnasio se nota, nos miramos mas sólidos, se nos ve más delgados, etc. Cuando un cristiano cuando se ejercita en la piedad se nota por su entrega a Dios, por su rectitud, por su pureza.

En cualquier deporte, la falta de condición física hace que no demos la talla. Ej. Nos falta el aire, nos tiemblan la rodillas, el corazón se nos quiere salir, etc. Nos cuesta mantenernos en el juego.

Cuando no nos ejercitamos espiritualmente, sentimos que nos venimos apagando lentamente como cristianos, ya no tenemos la misma fuerza que antes, ya no nos anima lo mismo.

Si tu le preguntas a una persona que se ha alejado de la iglesia ¿Qué pasó? Te dirá que no estaba orando, ni leyendo su biblia, te dirá que ya no era entregado a la iglesia e inconstante.

¿Por qué Pablo le dice a Timoteo “Ejercítate”? Porque sabe que el ser humano si no está involucrado en los asuntos de Dios, fácilmente se apaga y pierde el ritmo.

Los expertos en nutrición concluyen que el ejercicio es vital para la salud de las personas. Fumar, comer alimentos con mucho colesterol y grasa, y vivir en un estado de ansiedad, aumentan el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. Estás enfermedades son una de las principales causas  de muerte en el mundo. Si eso ocasiona la falta de ejercicio físico, imagínate lo que puede hacer la falta de ejercicio espiritual.

Deja de hacerlo y te costará más la siguiente vez…
  • Deja de compartir tu fe y te va a costar la siguiente vez…
  • Deja de ir a tus reuniones y te va a costar nuevamente ir…
 Piensa, ¿Qué áreas de tu devoción a Dios que has dejado de ejercitar? ¿Cuánto desarrollas tu humildad, tu compasión, tu amor, tu pureza?

Las áreas más débiles son las que debemos desarrollar.

V.8  pues aunque el ejercicio físico sirve para algo, la piedad es útil para todo, porque tiene promesas de vida para el presente y para el futuro.

El ejercicio físico sirve para algo…no es malo, es bueno hacer ejercicio, pero el ejercicio espiritual es mejor.

En el mundo antiguo, especialmente en Grecia, los gimnasios tenían sus peligros. Para los jóvenes griegos la gimnasia era la parte más importante de su educación. Pero el mundo antiguo estaba invadido por la homosexualidad, y los gimnasios eran notorios como semilleros de ese pecado particular.

Aunque el ejercicio físico es bueno, es bastante limitado porque cuando te ejercitas físicamente, parte de tu cuerpo se desarrolla, pero no tus principios, pero no tu alma, pero no tus convicciones, pero cuando te ejercitas en la piedad el hombre se ejercita en todas las áreas.

¿Por qué ejercitarnos en la piedad? Porque las recompensas son eternas.
  • Tiene promesas para esta vida…
Hermanos en esta vida como cristianos vamos a sufrir (no estamos exentos del sufrimiento) vamos a pasar situaciones de injusticia, vamos a ser heridos por otros hermanos, vamos a ser maltratados, pero si te mantienes ejercitándote en la piedad, Dios estará contigo todos los días de tu vida, te dará fuerza y será un Padre para tí.
  • Tiene promesas para el futuro…
¿Qué recompensa nos da para la vida futura?
Trabajamos para un día asegurar nuestro lugar en el cielo. Es seguro que si estamos creciendo, amando a Dios, si vivimos involucrados en su reino, seguramente estaremos un día en el cielo.

Sí, el ejercicio físico es bueno, ayuda a mantenernos jóvenes, pero la piedad trae promesas de vida eterna…

La grandeza de la meta hace que el esfuerzo valga la pena.

V.10  Por eso mismo trabajamos y luchamos, porque hemos puesto nuestra
 esperanza en el Dios viviente, que es el Salvador de todos, especialmente de los que
creen.

Por eso trabajamos…y luchamos…
Nadie se va a ejercitar por ti…EJ. Imagínate que alguien te dijera “Voy a gimnasio y me voy a entrenar por ti”, sería imposible.

Hoy muchos productos ofrecen resultados son esfuerzo… (Maquinas para hacer abdominales).

Ejercitarnos en la piedad, requiere un esfuerzo, el mismo Pablo se ejercitaba “por eso trabajamos y luchamos”…Dios espera que sus hijos progresen, que estén enfocados, que entregen sus vidas y que se ejerciten espiritualmente.

Se un hombre fuerte, pero no porque eres fuerte físicamente, sino porque te ejercitas espiritualmente, porque te ejercitas en la piedad.